Es una infección bacteriana contagiosa que compromete los pulmones y que
se puede propagarse a otros órganos.
Causas
La tuberculosis pulmonar es causada por la bacteria llamada Mycobacterium
tuberculosis y se puede adquirir por la inhalación
de gotitas de agua provenientes de la tos o el estornudo de una persona
infectada. La infección pulmonar resultante se denomina tuberculosis primaria.
La mayoría de las personas se recupera de la infección de tuberculosis
primaria sin evidencia mayor de la enfermedad. La infección puede permanecer
inactiva por años; sin embargo, en algunas personas se puede
reactivar.
Síntomas
La fase primaria de la tuberculosis normalmente no causa síntomas.
Cuando los síntomas de tuberculosis pulmonar se presentan, pueden abarcar:
- Tos (algunas veces con expectoración de moco)
- Expectoración con sangre
- Sudoración excesiva, especialmente en la noche
- Fatiga
- Fiebre
- Pérdida de peso
- Dificultad respiratoria
- Dolor torácico
Tratamiento
El objetivo del tratamiento es curar la infección con fármacos que
combatan las bacterias de la tuberculosis. El tratamiento de la tuberculosis
pulmonar activa siempre implicará una combinación de muchos fármacos. Se continúa la administración de todos los fármacos hasta que
las pruebas de laboratorio muestran qué medicamentos funcionan mejor.
Cuando las personas no toman sus medicamentos para la tuberculosis según
las instrucciones, la infección puede volverse mucho más difícil de tratar. Las
bacterias de la tuberculosis pueden volverse resistentes al tratamiento, lo
cual significa que los fármacos ya no hacen efecto.
Cuando exista la preocupación de que tal vez un paciente no se tome todo
el medicamento de acuerdo con las instrucciones, es probable que un médico
tenga que vigilarlo para que tome los medicamentos recetados. Este método se
denomina terapia con observación directa. En este caso, los fármacos se pueden
administrar 2 o 3 veces por semana, según lo recete el médico.
La tuberculosis pulmonar puede causar daño permanente a los pulmones si
no se trata oportunamente.
Los medicamentos usados para tratar la tuberculosis pueden causar
efectos secundarios, que incluyen problemas hepáticos. Otros efectos
secundarios abarcan:
- Cambios en la visión
- Lágrimas y orina de color anaranjado o pardo
- Salpullido
La tuberculosis es una enfermedad que se puede prevenir, incluso en
aquellos que han estado expuestos a una persona infectada. La prueba cutánea
para tuberculosis se emplea en las poblaciones de alto riesgo o en personas que
pueden haber estado expuestas a esta enfermedad, como los trabajadores de la
salud.